Uno de los principales objetivos de INMOA no es solo tratar y curar los diferentes tipos de cáncer de nuestros pacientes, sino también mejorar su calidad de vida durante el tratamiento. Una de las vías para conseguirlo es a través de la inyección intravenosa de Vitamina C que permite paliar los efectos secundarios de los tratamientos tan agresivos como quimioterapia o inmunoterapia
La vitamina C juega un papel fundamental en la estructura del tejido conectivo, así como en la inflamación y en el sistema inmune. En el caso de los pacientes oncológicos, su organismo suele presentar deficiencias en esta molécula y por tanto resulta muy beneficioso para ellos darles esta suplementación directamente en su sangre.
Para notar una mejoría en el estado del paciente es importante que estas inyecciones se realicen de forma periódica siguiendo los consejos del especialista. De esta forma el paciente podrá notar la reducción de efectos secundarios provocados por los tratamientos contra el cáncer que resultan tan agresivos para el organismo como radioterapia, quimioterapia o inmunoterapia. Además, también notarán una mayor fuerza y vitalidad.
Es el caso de Jorge paciente oncológico con cáncer de páncreas. Él mismo define la Vitamina C intravenosa como “lo que le mantiene vivo” y es que, tras tres tratamientos de quimioterapia y un ensayo clínico, él mismo se asombra con los efectos de la Vitamina C que, asegura, “le quitan el 90% de los efectos secundarios y le aportan vitalidad y apetito”. Algo que también nota en su aspecto físico y el color de su piel, especialmente en la cara
POTENCIAR LA VITAMINA C A TRAVÉS DE LA ALIMENTACIÓN
Si bien es cierto que la Vitamina C tiene mayor efecto si se introduce en nuestro organismo de forma intravenosa, lo cierto es que podemos beneficiarnos de algunas de sus propiedades al ingerirla mediante nuestra alimentación. Por eso es recomendable incluir en la dieta del paciente oncológico alimentos ricos en Vitamina C.
Algunos de los alimentos ricos en Vitamina C que podemos incluir con mayor asiduidad en nuestra dieta son por ejemplo frutas cítricas como las naranjas o el pomelo y por tanto sus derivados. Además, también son ricos en esta vitamina el kiwi y el pimiento, tanto rojo como verde, así como el brócoli, las fresas, el melón y el tomate. Toma nota, e inclúyelos en tu próxima lista de la compra para poder disfrutar de todos sus beneficios.
Y recuerda, ante cualquier pregunta sobre el tema, no dudes en consultar con tu médico. El equipo de expertos de INMOA está disponible para ayudarte.